
Simposium entre Neuronas y Legado
Juan A. de Carlos y la huella de Cajal y acto de donación de facsímiles de cuadros docentes de Cajal al Instituto Cajal/ Centro de Neurociencias Cajal (CNC)-CSIC.
Santiago Ramón y Cajal sorprendía a los lectores de La Clínica – Semanario de Medicina, Cirugía y Farmacia, en la serie de artículos de divulgación que denominó Las Maravillas de la Histología firmados con el seudónimo de Doctor Bacteria.

Juan A. de Carlos y la huella de Cajal y acto de donación de facsímiles de cuadros docentes de Cajal al Instituto Cajal/ Centro de Neurociencias Cajal (CNC)-CSIC.

Santiago Ramón y Cajal: Arquitecto del Cerebro, Espejo Personal y Pionero del Futuro.

Las Contribuciones Ocultas de Santiago Ramón y Cajal a la Hematología y la Patología Sanguínea.

El linaje es directo e inequívoco: su «reacción defensiva» es la raíz de la inmunoterapia; sus «sustancias mitogénicas secretadas» son la raíz de la terapia anti-angiogénica; y sus «corpúsculos germinales» son la raíz de la teoría de las células madre cancerosas.

Las Flechas del Pensamiento: Santiago Ramón y Cajal, la Escuela Española de Neurohistología y su Consagración como Memoria del Mundo.

Para la última generación de los “niños de la polio”, el tiempo se agota. La justicia, si no es ahora, no será.

«Sufrí terriblemente cuando lo pinté. Tuve que forzarme todo el tiempo. Nunca volveré a pintar un tema como ese».
Joaquín Sorolla

La historia de esta institución es la crónica de un sacrificio personal, una lucha contra la incomprensión y la burocracia que, sin embargo, se transformó en la piedra angular de la salud pública española.

«¡Señor, si usted no es D. Justo en persona, tiene que ser el hijo de D. Justo! ¡No me lo niegue usted!». Para bien o para mal, siempre sería hijo de su padre.

“Les confieso que soy pesimista sobre las posibilidades de este futuro, pero trabajo cada día para equivocarme”.
Senén Barro Ameneiro

Por cada gramo de heces humanas, nos encontramos más de mil millones de fagos…
Y lo que sabemos hoy del viroma humano es todavía muy poco. Quedan muchos más virus por descubrir en nuestros cuerpos, y se desconoce cómo pueden contribuir a nuestra salud.

“No es por él, que ya no se beneficiará en nada de cuanto hagamos, sino por nosotros y, sobre todo, por nuestros hijos”.
Senén Barro

En la conferencia recorrerán la inspiradora vida del que aún hoy es el neurocientífico más citado del mundo y, sin duda, el mayor referente de la historia de la ciencia española.

No podíamos seguir haciendo episodios sin hablar del padre de la neurociencia: D. Santiago Ramón y Cajal.
Paseando con Oliver Sacks.

La ciencia moderna está destinada hoy a suavizar antagonismos, a cicatrizar heridas, a estrechar distancias creadas entre los seres por una filosofía natural estrecha y egoísta.
Santiago Ramón y Cajal, 1883.

¡Quién osaría creer que organismos separados por inmensa distancia, ora por sus formas exteriores, ora por su interior conformación, como el hongo y el hombre, tienen un lazo común que los identifica y confunde!
Santiago Ramón y Cajal, 1883.

Hallo también atrayente cierto sentimiento de curiosidad frescamente satisfecha, y un fervor de pasión hacia el estudio de los arcanos de la vida, que en vano buscaríamos hoy en los escritos primerizos de la ponderada, ecuánime, circunspecta y financiera juventud intelectual.
Santiago Ramón y Cajal, 1883.

Si la célula es lo que vive, la célula es solamente lo que enferma y lo que muere, y a ella será preciso dirigir, en definitiva, el análisis patogénico y los recursos de la terapéutica.
Santiago Ramón y Cajal, 1883.

La biología, Ia ciencia que más nos importa, que más de cerca nos afecta, que da conocimiento de la propia personalidad en sus dos fases anatómica y fisiológica. Santiago Ramón y Cajal, 1883.